Un
secundario mayúsculo, mítico, un eterno mafioso y policía en el celuloide, un
actor que no comenzó como tal, sino como asistente en películas y series a
finales de los 70. Fue entonces cuando, tras 18 años de servicio en la policía
de Chicago, Michael Mann puso sus ojos sobre Dennis Farina, al que otorgó un
papel corto en su film “Ladrón”. Volvieron a trabajar juntos posteriormente en
las series “Crime Story” y “Corrupción en Miami”, así como en la película “Manhunter”,
interpretando al agente del FBI Jack Crawford.
Aún de servicio como
policía, Farina se convertiría en un rostro habitual de la televisión y el cine
estadounidenses de los 80. Películas como “Huida a medianoche” y series como “Remington
Steele” ayudaron a ser reconocido por el gran público, pero no sería hasta los
90 cuando le lloverían papeles de mayor repercusión. Así, haría aparición en “En
el punto de mira”, “Cómo conquistar Hollywood”, “Eddie”, “Un romance muy
peligroso” o “Salvar al soldado Ryan”, hasta que llegó el que se convertiría en
uno de sus papeles más célebres, el del primo Avi en “Snatch. Cerdos y
diamantes”.
Desgraciadamente,
durante los cuatro años siguientes no consiguió papeles a su altura, hasta que
llegó a su vida “Ley y Orden”, donde interpretó durante dos años al detective
Joe Fantana, aunque a partir de aquí, sin contar su genial aportación a la
serie del año pasado “Luck”, junto a Dustin Hoffman, y su aparición este mismo
año en “New Girl”.
Una lástima que se
prodigara tan poco, pues era un actor sensacional y provisto de una enorme
presencia ante la cámara. Y, con todo, nos regaló más de 70 trabajos en cine y
televisión. Nos deja a los 69 años de edad, víctima de una embolia pulmonar, según ha declarado su publicista. Hasta la vista, primo Avi, ya no tendrás que volver nunca más a Londres.
Descanse en paz.
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