Vuelve un habitual de esta sección, Manuel Ortega Lasaga. Con cierto retraso hablo de este cortometraje, pero no he tenido mucho tiempo a sentarme a escribir sobre él la minicrítica que su autor merece. La historia es la de un hombre que tiene un proyecto, una ilusión... Así resume en su sinopsis la trama este sensacional trabajo del que les dejo el vídeo y a continuación, la mencionada crítica. Y a la espera estoy de ver su próximo proyecto, "Still Shot in Vietnam", con el que Lasaga cruza aguas internacionales.
Rayando a la Gutenberg ****1/2
Si por algo se caracteriza Manuel Ortega Lasaga es por su imprevisibilidad. Nunca sabes por dónde va a salirte este cineasta nada convencional que se rodea siempre de un variopinto grupo de personajes que rozan el absurdo. Lasaga es el perfecto domador de las criaturas de ese circo que es su cine, criaturas bizarras y excéntricas a las que su autor retrata con burla y desdén, sin aparente aprecio, pero consiguiendo que el espectador se identifique con ellas. Sus obras no tienen una temática común aparente ni un estilo visual reconocible, pero es en su alejamiento de los convencionalismos, y en su particular parada de los monstruos, donde radica la esencia de su obra.
Tras la espléndida “Santiago Martínez, cazador de ovnis y alienígenas” con la que tantos premios se ha hecho de manera totalmente merecida, hay que decir que Lasaga vuelve a dar en el clavo con su nueva propuesta. “Rayando a la Gutenberg”, como bien dice su introducción, es la historia de uno al que le gusta reivindicar los derechos de las clases obreras, de los desfavorecidos. Así que armado de valor se presenta en un despacho con una idea, una ilusión: dar una nueva definición al concepto “cine dentro del cine”. Obsesionado por su, en apariencia, descabellada empresa, luchará por el derecho de unas pequeñas obreras a tener un sitio en este mundo de gigantes corporaciones burocráticas. Un toque de denuncia social que engrandece aún más si cabe el cortometraje.
Por si fuera poco su historia, que sorprende a cada segundo y va in crescendo, un gran acierto es el estilo visual del cortometraje. Seis minutos compuestos de imágenes, de fotogramas narrados y con sonido en off que constituyen un prodigio del montaje, fruto del propio Lasaga en colaboración con su habitual Laura García Pérez. Repiten también en el equipo Belén Río Calonge en la producción y Jorge Ortega en la fotografía. Un gran trabajo de sus dos actores, José M. Torralbo y Kira Sagua, y por supuesto de esas anónimas pequeñas obreras, sin las cuales este magnífico corto no habría sido posible.
4 comentarios:
Preciosa y excelente manera de definir un trabajo que yo también aprecio sobremanera, me divierte otro tanto y no me canso de ver. ¡Gracias!
Manu es un crack. He cambiado el vídeo y puesto su "versión del director" jeje por llamarla así.
Hola si chechu y kira son estupendos aunk yo ivamir soy el que doble la voz de chechu y tambien hice de extra ademas del titulo que se me ocurrio ami.
tambien hay que reconocer a los demas porque son fundamentales txutxo e ivamir.
Muchas gracias por tu comentario Ivamir y siento haber omitido a los dobladores, no sé cómo se me pasó por alto, si el doblaje fue una de las cosas que me llamó la atención cuando vi el corto. Al principio choca, en especial la voz de Kira, pero después se vuelve hasta imprescindible. Mil disculpas, y gran trabajo.
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