No, no nos habíamos olvidado de ella. Seis meses han
pasado desde el estreno de “El Hobbit: Un viaje inesperado”, y seis meses
aproximadamente restan para el estreno de su secuela, “La desolación de Smaug”,
y para que no lo olvidemos Warner, MGM y todos los que están tras ella nos
regalan un teaser trailer que es, en realidad, un trailer en sí mismo, o así lo
era hace tiempo. Hoy por hoy sabemos que ésta es la antesala a un trailer mucho
más detallado y spoilerante –no sé si existe el término, pero suena bien-.
¿Necesita realmente que lo recuerden? Sí, pues si no nadie se acordará ni irá a
verla, y no, porque esto se vende ya solo, tanto que este teaser no sabe a nada
ni sorprende en absoluto. Ya no hay tanto humor como en los avances de la
primera entrega, ni falta que hace. Aquí hay que potenciar la épica, hacer
aparecer a un viejo amigo y poner a la guapísima Evangeline Lilly a soltar
flechas. No engaña a nadie, ni intenta vendernos nada novedoso. Y para los que se lo pregunten: medio año después y después de verla varias veces, sigue encantándome “El
Hobbit”.