Survival of the dead *1/2
Romero está más muerto que vivo
Por mucho que reniegue de ella, con “Land of the dead” Romero consiguió recuperar el espíritu de su aún transgresora trilogía de los muertos original, logrando que la temática zombi volviera a encajar con la crítica política y social. Si en aquella vertió su ira contra el racismo, el consumismo y el papel del ejército, en la primera entrega de la que podríamos denominar “Trilogía de la Resurrección Zombi” realizaba una feroz disección del abuso de poder y la diferencia de clases. Pero lo más llamativo del discurso era que al parecer Romero se había modernizado en la puesta en escena para hacer el producto más comercial pero sin abandonar sus aires clásicos, su filosofía del cine de muertos vivientes que tanto revolucionara el género hace más de cuarenta años.
Pero entonces llegó “Diary of the dead”, film plomizo y un rotundo paso atrás en el cual fallaba el montaje, donde Romero demostraba no encontrarse cómodo alternando nuevas tendencias (la cámara en primera persona, el formato digital, etc.), y sobre todo el mensaje, repetitivo e incapaz de ligar la denuncia de nuestra dependencia de las nuevas tecnologías con la temática zombi. Su última aportación al género podría definirse como secuela de aquella, tanto por usar a algunos de sus personajes como por lo patético de su resultado final.
La historia sigue dos tramas paralelas que acaban confluyendo en una única. Por un lado tenemos dos clanes familiares, los O’Flynn y los Muldoon, que viven conjuntamente en una isla apartada del mundo y cuyas formas de ver a los muertos vivientes son radicalmente opuestas: mientras los O’Flynn defienden el exterminio zombi sin miramientos, los Muldoon tienen la firme creencia de poder cambiar los hábitos alimenticios de los zombis en un intento por hacerlos menos peligrosos, encadenando a sus seres queridos en busca de una cura a su adicción a la carne humana, a la vez que pretenden así preservarlos como antaño las personas recordaban a sus familiares muertos mediante las fotos de sus cadáveres adoptando posturas cotidianas. Y por el otro tenemos al grupo de guerrilleros con los que los protagonistas de “Diary” se cruzaban, y que buscan un lugar idílico donde vivir. Como ya podrán imaginarse, ese sitio utópico será la susodicha isla.
Romero reincide en la misma idea que ya explotara en la primera entrega de esta nueva trilogía y en “Dawn of the dead” y “El día de los muertos”, la de ver a los zombis como seres que rememoran y repiten hábitos de cuando aún estaban vivos, y lo usa para justificar la hipótesis de los Muldoon. Y al menos consigue que esta vez la crítica social hacia la barbarie de los vivos sí hermane con el género, algo que en la anterior no consiguió. Pero falla en todo lo demás incluso más que en aquella. Porque esta nueva vuelta de tuerca del “maestro” posee un guión ridículo –solo se salvan contados momentos de la película, como la limpieza de zombis de los coches en el ferry o el incidente del pescador de zombis en la azotea-, una puesta en escena que a pesar de las claras reminiscencias al western resulta muy pobre, unos medios evidentemente limitados por la falta de presupuesto –el maquillaje y los efectos son de risa-, unas interpretaciones demasiado mediocres y, lo que es peor, la sensación de que el otrora maestro está en horas bajas, incapaz de renovarse a sí mismo. Porque de alguien como Romero, de alguien cuyo nombre es sinónimo de “padre del cine zombi”, se espera mucho más que esta aburrida propuesta que no aporta nada nuevo al género, y cuya figura empieza a oler demasiado mal. Como si estuviera más muerto que vivo, cinematográficamente hablando.
A favor: que esta vez la crítica social sí encaja con la temática zombi
En contra: todo lo demás, en especial la sensación de que Romero está más muerto que vivo
2 comentarios:
Buena entrada ,la verdad es que cuando vi que romero queria volver a hacer de nuevo películas de zombis me dió mala espina porque seguramente no superaria las leyendas que creo el llamado padre del cine zombi ,a veces parece que el dinero es más tentativo que otra cosa ,almenos ya no perdere el tiempo viendolas leyendo tu post ya me quedo claro,saludo!
Hombre, Land of the dead puedo decir que es recomendable, pero las otras dos... ejem. Cada cual con sus gustos pero las dos últimasa son malas a rabiar.
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