El crítico cinematográfico Jesús Palacios definió en su libro Goremanía la cinefagia como "el término acuñado por algunos críticos y escritores cinematográficos modernos, por contraposición a cinefilia. Se sobreentiende que el cinéfago come de todo y disfruta tanto del buen cine como del peor, sazonándolo todo con sentido del humor.”
Puede que esté mal decirlo, pero me considero un auténtico cinéfago entendiéndolo de la manera que Palacios lo entiende. Pero iré un poco más allá. Me atrevería a decir que la cinefagia es una dulce patología, las consecuencias de una droga como es el cine que crea adicción desde temprana edad, cuando asistimos por primera vez a una sala de cine vayamos a ver la película que sea. O incluso desde antes, cuando te pasas los primeros años de tu vida sentado ante la televisión, viendo la sesión de cine de La Primera o La2 en familia.
Por ello este servidor ha creado este weblog. Pero no para luchar contra esa enfermedad que es la cinefagia, sino para todo lo contrario: satisfacerla alimentándonos de cuanto más cine mejor, de todas las épocas, países, géneros, etc. Desde hoy queda inaugurado este rincón para que todos los que aman (y los que lo detestan también, por qué no) el cine tengan su encuentro e intercambien ideas.
A todos ustedes, bienvenidos y a engullir cine, que es sano.
3 comentarios:
Yo también me considero un cinefago, y doy fé que a veces se puede disfrutar mucho más de un cine mal visto por la crítica sesuda que con el que tiene su bendición.
Encantado de visitar tu nuevo blog
Efectivamente Gerardo. Que se diga que también se puede disfrutar viendo un Porkis que una peli de John Ford. Me alegro de que hayas creado este blog, porque es el síntoma de no has cambiado tanto, por lo menos en lo que a gusto sobre cine se refiere. Saludos.
Sí, como bien dices, tú que me conoces antes que muchos, no he cambiado. Lo que he hecho es evolucionar pero sin olvidar mis orígenes. Hoy en día no veo con los mismos ojos una película como Porky's, pero la recuerdo con añoranza por los viejos tiempos. Por eso prefiero ni ver películas de mi infancia. Muchas gracias por pasarte por la web.
A más ver, G.
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