martes, 13 de agosto de 2013

LA CRÍTICA: Sharknado

Semper paratus
En un momento de “Sharknado”, el protagonista ayuda a su amigo a escapar de las fauces de un escualo asestándole un golpe con su tabla de surf mientras está sobre una moto acuática, con un amenazante cielo gris sobre ellos. Eso sí, en cada plano general se aprecia que hacen pie donde están, que luce el sol y que el tiburón se encuentra por el lado opuesto de la moto.

Es un solo ejemplo de la descuidada producción y montaje que luce este film, estrenado por la endemoniada productora Asylum, especialista en copiar títulos de enorme éxito con bajo presupuesto. Fallos de racord, malas interpretaciones, planos repetidos, agujeros de guión, diálogos absurdos, una banda sonora funcional y televisiva, unos efectos especiales de andar por casa… Una especie de Grindhouse, pero todavía peor hecha.

Y, aunque su calidad sea nula, cuesta mucho valorar negativamente una película como esta. Es tan rematadamente mala que divierte, y lo mejor de todo es que sabe que lo es. No busca otra cosa que entretener, y en ese sentido es una de las obras más sinceras y directas que se han podido ver en mucho tiempo. Un despropósito mayúsculo inverosímil –ya su mismo punto de partida, tiburones que atacan en pleno vuelo dejándose llevar por tornados- que no obstante tiene su mejor arma en un guión divertido, sin prejuicios, en el que todo vale, repleto de instantes ridículos pero hilarantes –la familia en constante crecimiento del protagonista, el momento McGyver en la ferretería-, que parece más el piloto de una serie de televisión que un film propiamente dicho.


Eso sí, para ver “Sharknado” es imprescindible estar tan preparado como sus personajes para dejarse llevar por noventa minutos de puro despiporre sin tapujos, no analizarla con lupa y buscar simplemente entretenimiento. Si se analiza en términos de calidad cinematográfica, no se sostiene, pero en espíritu estamos ante un pasatiempo veraniego más consciente de su propia condición de mala película que muchos títulos estrenados por la puerta grande con mejor envoltorio. Es lo que la ha convertido en un éxito. Como dirían sus personajes, Semper paratus.


A favor: su falta de prejuicios, que es mala y lo sabe
En contra: verla analizándola con lupa
Calificación: *** 

3 comentarios:

  1. Qué rapidez! A disfrutarla, pero recuerda verla sin expectativas

    ResponderEliminar
  2. Es para eso, para divertirse. Si vas con otra idea en mente, te sientes estafado.

    ResponderEliminar