viernes, 21 de enero de 2011

El corto cinéfago: Nominados al Goya a Mejor Cortometraje de Ficción


Seguimos nuestro repaso de los cortometrajes finalistas en los Goya de este año. En este caso le toca el turno al cortometraje de ficción, y a diferencia de los de animación, disponemos íntegros de todos para poder disfrutarlos. Y lo cierto es que cuesta quedarse con uno en concreto, ya que nos encontramos ante cuatro pequeñas joyas y cualquiera merece el premio.  Gracias al FIBABC (Festival Iberoamericano de Cortometrajes ABC) por facilitar el material. Dicho esto, comenzamos el repaso.

"Adiós papá, adiós mamá"
Este cortometraje de Luis Soravilla es, con diferencia, el más divertido de los cuatro, y también el más corto en duración. El gran Enrique Villén coescribe el guión, además de protagonizar la historia junto a otros dos excelentes intérpretes: Gracia Olayo y Miguel Ángel Muñoz. Soravilla nos habla de cómo es cada vez más difícil para unos padres desprenderse de nuestros hijos, y lo hace con un envidiable sentido del humor y unos diálogos punzantes. Atención a la vuelta de tuerca que nos tiene preparados hacia el final. Desternillante.


"El orden de las cosas"
Ha costado decidir, pero éste es mi favorito. Los hermanos Esteban Aleda, César y José, filman este desgarrador trabajo que no desaprovecha sus 19 minutos para plasmar una dura historia con la violencia de género como telón de fondo acerca de la esperanza, ya sea la falsa que nos lleva a pensar que el orden de las cosas cambiará por sí solo, o la verdadera en que nunca es tarde para tomar una nueva decisión y empezar una nueva vida. Una obra de arte, con mucho contenido metafórico, en el que su protagonista, Julia –fantástica Manuela Velles-, vive su vida en una bañera, una bañera que se irá llenando gota a gota hasta reunir el valor necesario para romper con su trágica vida. Biel Durán, Javier Gutiérrez y Mariano Venancio encarnan perfectamente, en distintos momentos temporales, a un mismo personaje, el del marido que busca desesperadamente la herramienta de tortura que ata a Julia a su propia vida.

"Una caja de botones"
María Reyes Arias dirige este duro relato sobre la pérdida y la madurez que se vuelve tierno gracias a que está contado, en su mayoría, desde el punto de vista de los niños, capaces de desarrollar la más desbordante imaginación para superar una difícil etapa de sus vidas. Porque a pesar de contar en su reparto con un excelso actor, Antonio de la Torre, el peso recae en sus pequeños protagonistas, y en especial en Sara Mantxola. Es, no obstante, el más largo de los cuatro, una duración que podría haberse acortado un poco, y a la vez el que de mejor manera maneja la banda sonora, sin que resulte reiterativa y machacona.


"Zumo de limón"
La vida es como un limón. La vas exprimiendo hasta que al final se acaba y no hay vuelta atrás. Esto es lo que Muriel y Miguel Romero, con guión del primero, nos cuentan en “Zumo de limón”, y lo hacen a través de una abuela que tras quedarse viuda debe recoger los frutos que ha ido cosechando a lo largo de su vida, que han hecho que su familia se desentienda de ella y acabe en un asilo, donde deberá vivir con el miedo a morir sola. Mención especial a su actriz principal, Sélica Torcal, una profesional del teatro y el doblaje en España.

Ver cortometraje

No hay comentarios:

Publicar un comentario