Taquilla USA: Ni Sandra Bullock ni Channing Tatum pueden con los monstruos

Otro gran fin de semana en la taquilla USA, aunque ligeramente por debajo del de hace un año,  para cerrar un mes de junio de infarto. Un fin de semana en el que ha vuelto a triunfar, aunque no por mucha diferencia con la segunda plaza, “Monsters University”. El film de Pixar cae un extraordinario 44% para irse a los 171 millones de $ en tan sólo diez días. Extraordinario si consideramos que venía de un estreno muy potente. Con esto, su horizonte sigue en los 250 millones de $ de la primera entrega a pesar de la inminente llegada de “Despicable Me 2”, aunque a nivel internacional seguramente quede bastante por encima de aquella. Por ahora, en todo el mundo lleva unos buenos 300 millones, a falta de estrenarse en otros grandes mercados.

Los dos estrenos grandes de la semana no han podido con ella, y han seguido caminos muy opuestos. Fox ve cómo “The Heat” se va a los 40 millones de $, casi lo que ha costado, salvando así a la productora del desastre que supuso recientemente “The Internship”, que apenas supera su cifra de apertura en el décimo puesto de la lista. Así, la comedia con Sandra Bullock y Melissa McCarthy debuta por encima de comedias adultas recientes como “Bridesmaids” o “The Identity Thief”, y debería quedar en torno a esta última al final de su carrera.

Peor le ha ido a “White House Down”, el primer gran batacazo del verano. Hace un año, Channing Tatum estrenaba “Magic Mike” con enorme éxito, pero no ha sido así con este thriller de acción con Roland Emmerich al timón, que se debe conformar con unos pobres 25 millones de $. Y, analizándolo fríamente, era de esperar ante la escasa visibilidad de la propuesta. Se estrena por debajo incluso de “Olympus Has Fallen”, título de temática similar que, no obstante, costó considerablemente menos, 70 millones de $ frente a los 150 de “White House Down”. Aquella ha rozado los 100 millones de $, pero veremos si ésta llega ante la competencia que se le viene encima.

Justo lo contrario que le ha ocurrido a “War World Z”, una de las grandes sorpresas de la temporada. Tras su excelente inicio cae un correctísimo 55% para irse a los 123 millones de $, con los ojos puestos en llegar a los 170 millones de $ al final de su carrera, más de lo que se esperaba de ella. Además, en todo el mundo lleva unos buenos 259 millones de $. Correcto también es el descenso del 50% de “Man of Steel”, confirmando que su fuerte caída el fin de semana pasado era debido a su sobresaliente inicio. 248 millones de $ lleva en total, y aún tiene opciones para alcanzar los 300 millones de $. 520 millones de $ es su nada desdeñable  cifra a nivel mundial.

Excelente es también el camino que llevan “This is the end” y “Now you see me”, dos sorpresas inesperadas de la temporada que se apenas caen un 34% y suman ya 74 y 104 millones de $, respectivamente, y aún con cuerda por delante.

Por lo demás, fuertes descensos incluso en el ámbito limitado. La gran noticia es que Almodóvar ha estrenado con éxito “Los amantes pasajeros” bajo el nombre de “I’m so excited!”, logrando la mejor media por sala de toda la taquilla y amasando 103.000$ en cinco salas. Eso sí, la crítica y los comentarios están siendo desastrosos, por lo que no se espera de ella que sea un gran éxito USA del realizador manchego, algo a lo que ha estado acostumbrado en los últimos años.

Fuente: Box Office Mojo

Posters minimalistas (XI): Especial Tom Whalen

Con  el estadounidense Tom Whalen deberíamos aplicar no sólo el término minimalista, sino también retro. A través de sus homenajes a Marvel, DC, la Universal, Star Wars, Terminator o los zombis vemos todo un muestrario de su particular visión alternativa de los carteles de toda la vida. Un gran amante de los cómics y las pelis de monstruos cuya obra, según dicen, recuerda a una mezcla entre el Art Decó y el estilo de Saul Bass, y al que algunos confunden con Eric Tan, al que también dedicaré un especial. 

La dimensión desconocida (VII): El verdadero Superman

Ahora que “Man of Steel” triunfa en todo el mundo, aunque por ahora con vuelo más bien raso, he buceado por los más recónditos parajes de la red y me he topado con el blog Mundo Superman, el cual publicaba a comienzos de este año una imagen insólita bajo el nombre “El verdadero Superman”. La foto en cuestión consiste en un montaje realizado por un usuario llamado morphinapg en la web Reddit.com, compuesto de la mezcla de algunos de los rostros que han interpretado al superhéroe: Dean Cain, Brandon Routh, Tom Welling y, cómo no, Christopher Reeve y Henry Cavill. ¿El resultado? Pues dicen que se parece a John Haymes Newton, el actor que interpretó a Superboy. ¿Será éste el Hombre de Acero definitivo? Ahí queda abierto el misterio de este nuevo capítulo de “La dimensión desconocida”.

Nuevo tráiler de "Pacific Rim". Lo mejor para el final

A muchos que parece que no mean sin Guillermo del Toro en su vida les parecerá una herejía este comentario: no le había visto el atractivo a “Pacific Rim”… hasta ahora. Un tráiler sencillo, que juega a ser épico y dejar huella, con el que por fin me han convencido. Otra cosa es que acuda al cine a verla. Pero al menos le daré una oportunidad. A no ser que la crítica la destroce antes. A esperar al 12 de julio.

En paz descanse... Richard Matheson (1926-2013)

De manera directa o indirecta, le tengo siempre presente en el blog. No sólo habiéndole otorgado el título de una sección aún en ciernes como “La dimensión desconocida”, serie que él mismo escribiera en los años 60, sino porque ha contribuido en el cine con su mejor arma: su palabra e imaginación. Hasta el punto de haber sido inspiración de numerosos cineastas.

Ya en 1950, Richard Matheson comenzaba a hacerse un nombre como autor de terror, ciencia-ficción y fantasía, y en 1954 publicaría una obra ya de culto llevada al cine en varias ocasiones, “Soy leyenda”. Ésta sentaría las bases sobre las que se inspiraría posteriormente “La noche de los muertos vivientes”, según ha reconocido el propio George A. Romero. No sería la única, ya que su trabajo sirvió de inspiración para multitud de filmes como  “A Stir of Echoes”, “Más allá de los sueños”, “Acero Puro” y  El hombre menguante”, entre otras. Matheson combinó también sus labores de escritor con las de guionista para cine y televisión, entre ellas “El cuervo”, de Roger Corman, y “El diablo sobre ruedas”, de Steven Spielberg, y series como “Más allá del límite”, “Cuentos asombrosos” o “Padre de familia”. Además, a modo anecdótico, tuvo una aparición no acreditada en “El Padrino. Parte II” como senador.

Matheson nos ha dejado a los 87 años de edad con un legado de más de una treintena de publicaciones literarias y más de 80 obras como guionista, que le hicieron ganar un premio Hugo por el libreto de “El increíble hombre menguante” y ser nominado, entre otros, a un WGA. Eso sí, también optó al Razzie por su osadía de escribir “Tiburón 3”. Descanse en paz, maestro.

Taquilla USA: Los zombis y los monstruos se hacen con la cartelera

Excelente fin de semana en la taquilla estadounidense, que se acerca a aquel Memorial Weekend que hizo historia hace apenas un mes. Casi 240 millones de $ cosechados por la totalidad de títulos, 190 de los cuales vienen de los tres primeros puestos. Además, dos de los estrenos han superado con creces las expectativas generales y se han ido más allá de los 65 millones de $, todo un logro en una época de enorme competencia.

Lo nuevo de Pixar, “Monsters University”, ha cautivado a crítica y público y se hace con unos fuertes 82 millones de $ en tres días y con la mejor media por sala de toda la cartelera. El 3D ha sido decisivo en este caso, y la secuela/precuela del éxito de 2001 se queda por encima de estrenos recientes de la casa como “Brave” o “Cars 2”. Su aguante día a día, por si fuera poco, es equiparable al del último gran taquillazo de la factoría, “Toy Story 3”. Ante las buenas críticas y comentarios que ha generado, no tendrá problemas en ser el título familiar del momento hasta la llegada de “Despicable Me 2” en dos semanas, y debería superar cómodamente los 255 millones de $ de la primera entrega. Estrenada de manera simultánea en muchos otros países, incluido España, la cinta se ha hecho con unos buenos 136 millones de $ en todo el mundo.

Mucho más incontestable ha sido el éxito de “World War Z”. Era un título que despertaba desconfianza por el tiempo que ha tardado en gestarse, los mil y un contratiempos en su realización, unos trailers que no dejaban muy buen sabor de boca y un referente literario venerado por una amplia comunidad fan. Y, con todo, la crítica y el público se han llevado una sorpresa con ella, y esto la ha hecho atesorar unos importantes 66 millones de $. Está gustando, y podría dar una sorpresa en su resultado global final. Por ahora, en todo el mundo se ha hecho con 111 millones de $, habiendo costado en torno a los 190 millones. Huele a taquillazo veraniego.

Y en medio de toda esta vorágine de millones, ¿qué ha ocurrido con “Man of Steel”? A priori, su caída del 65% se prevé fuerte, aunque su total en diez días sea de unos robustos 210 millones de $. Si continúa con estos descensos le costará llegar a los 300 millones, a la espera de ver qué consigue en el resto del globo. No obstante, este descenso debe ser visto con otros ojos por diversas razones. En primer lugar, porque partía de un fuerte estreno consecuencia del efecto fan, que ha hecho que su caída sea fuerte este fin de semana. Si esto es cierto, a partir de ahora debería presentar descensos suaves que apenas superen el 40%, como le ocurrió hace un año a TDKR. Y en segundo lugar, porque la competencia era enorme, parte de la audiencia se ha visto seducida por los dos estrenos grandes del momento, especialmente WWZ, y el descenso no sería sólo grande, sino también positivo. El fin de semana que viene saldremos de duda.

A partir de aquí, buenos mantenimientos en el top 10 para un fin de semana en el que muchos títulos perdían una importante cantidad de salas. Ganando salen especialmente las otras dos cintas del top 5, “Now You See Me” y “This is the End”, que aguantan un 37% y un 29%, respectivamente, para irse a los 57 y los 94 millones de $ cada una. Las demás sí caen por encima del 50%, pero a costa de perder casi un millar de salas. Como “Fast & Furious 6” y “Star Trek Into Darkness”, que pese a todo ceden solamente un 50% después de más de un mes en cartel y su total es de 228 y 216 millones de $. Además, las dos son las más taquilleras de sus respectivas franquicias a nivel mundial, con 645 y 430 millones de $ cosechados respectivamente. Igual que “Iron Man 3”, que cierra el top 10 y en su octavo fin de semana, a pesar de la pérdida masiva de copias, baja un 26% con 403 millones locales y más de 1.200 en todo el mundo.

En el sector más limitado, una vez más, vemos nuevas alegrías. “The East” y “The Bling Ring” amplían salas, sobre todo esta última, y esto se traduce en ascensos del 20 y el ¡832%! La primera supera los 2 millones y la segunda el millón de $. E, incomprensiblemente, “Before Midnight” pierde la mitad de sus casi 1000 salas, pero eso no la hace derrumbarse. Un 32% de bajada y ya cerca de los 5 millones de $ así lo atestiguan.

Fuente: Box Office Mojo

LA CRÍTICA: El hombre de acero

Superman: Año Uno

Cuando John Byrne se hizo con el control del personaje estrella de la editorial DC tenía una ardua tarea: hacer novedoso y original un superhéroe ya caduco por casi medio siglo de multiversos y poderes ilimitados que habían convertido al Hombre de Acero en una triste caricatura de sí mismo. Y su tarea era doblemente ardua, pues su cometido llegó después del exitazo del “Superman” de Donner, un clásico del género que había convertido la mitología del original de Jerry Siegel y Joe Shuster en algo tan cercano al gran público como la mitología griega o la figura de Jesucristo, y que a su vez trataba de conciliar décadas de historia del personaje en un solo metraje. Y con todo, lo consiguió con creces, revitalizando el cómic en una época en la que sus adaptaciones cinematográficas se erigirían como el peor reflejo de aquello hacia lo que había evolucionado Kal-El sobre el papel.

Bebiendo de manera bastante directa, y nada disimulada, de la obra de Byrne, “El hombre de acero” tiene el mismo objetivo, el de adaptar Superman a los tiempos que corren, intentar contar lo mismo sin que suene a ya visto. Y lo primero que se desprende de ella es que posee una irregularidad fruto de su condición de hija de varios padres. Por un lado posee esa hondura dramática y reflexiva, así como su sentido de la estructuración narrativa enfocada al gran público, de Christopher Nolan. Por otro, la labor de David S. Goyer sobre el libreto, un especialista en captar esencias pero no siempre desarrollarlas, a no ser que tenga alguien a su lado que le ate bien corto. Y por último, de Zack Snyder, un cineasta nervioso, adicto a las anatomías humanas perfectas, director que maneja la cámara como un rockero su guitarra eléctrica, y más dado a lograr un plano para el recuerdo y enérgico que a la profundidad de sus historias.

Esta película está influenciada pues por las lecciones de tres padres diferentes, como Kal-El/Clark Kent lo está de las contrapuestas enseñanzas de sus dos padres en la ficción, el terrenal y el kryptoniano. Y esto se nota mucho en la película, que se puede dividir en los dos mismos actos en los que se fragmentaba “Batman Begins”. Tras abrazar abiertamente los cimientos de la ciencia-ficción más espectacular que nos muestra Krypton como nunca antes se había hecho, asistimos al viaje de realización personal y de búsqueda de sus orígenes, a la vez que de su significado para este mundo, de nuestro protagonista. Un collage de relaciones paterno-filiales contado a base de flashbacks que pretende abarcar mucho en poco tiempo, y que en su segundo acto cobra importancia y significado, dándote cuenta de que entre tanta irregularidad en el montaje, había algo que contar, la historia de un héroe que debe descubrir el amor por la raza humana, una razón para que ésta merezca ser salvada, algo no demasiado fácil para un personaje con el corazón dividido entre dos mundos.

Y es curioso que la parte más equilibrada de la función sea precisamente la más caótica, sin entender este término como peyorativo. Zack Snyder modula su estilo por el bien de la propuesta, carga la cámara al hombro y acierta en la filmación de los pasajes más dramáticos, pero es en el segundo acto donde da rienda suelta a sus manías cinematográficas personales y nos brinda un espectáculo visual de caos y destrucción que deja la escena en Manhattan de “Los Vengadores” en pañales. Abandona su fanatismo por las cámaras lentas, pero lo cambia por el zoom digital y vuelve a hacer gala de su gusto por las anatomías de cómic clásicas, persigue al personaje en su vuelo, nos hace sentir el vértigo y los mareos, pero consiguiendo que nunca nos perdamos entre tanta acción y movimiento en una planificación de la acción repetitiva pero efectiva. En una película de un gran estudio como esta, es llamativo que se le haya dado libertad, y el resultado ha sido inmejorable.

No es perfecta, y ahí está el primer acto para atestiguarlo, un chiste final impropio de la sobriedad del conjunto o la falta de fuerza de los personajes femeninos –otra constante del cosmos nolaniano, librándose solamente la malísima Faora, un personaje más acorde a la filmografía de Snyder- frente a los masculinos –soberbios Kevin Costner, Michael Shannon y Russell Crowe, y correcto Henry Cavill, que se limita a dejarse llevar por la aparatosidad de la función-, pero su segunda mitad es todo lo estruendosa y sobrehumana que hace falta como para que al final todo encaje en su sitio. Tampoco es la obra sobre Superman definitiva. Simplemente es una adaptada a los nuevos tiempos, una que, ahora sí, puede rivalizar con el universo marvelita. Una revitalización cinematográfica necesaria y completa. Nuestro Superman: Año Uno.

A favor: la rotundidad de su prólogo y el acto final, capaz de crear solidez entre el caos

En contra: el primer acto, el más irregular

Calificación: ****

Posters minimalistas (X): Especial Martin Ansin

Más que minimalista, el uruguayo Martin Ansin realiza un trabajo cercano al cómic, y se aprecia también su predilección por los trazos de los carteles de clásicos de terror de la Universal, a los que también rinde un sentido homenaje. Su obra destila un cuidado por los detalles y unos dibujos limpios, destacando al personaje en cada cartel frente a una imagen icónica que defina un film determinado. Suyo es también uno de esos carteles mondo que ha salido en honor a “Man of Steel”.